martes, 28 de abril de 2009

Parches y remiendos


Zurcir calcetines
Pepefotos'o8







"Nadie remienda un vestido viejo con un parche de tela nueva, porque lo añadido tira del vestido, y se produce un desgarrón peor. Ni tampoco se echa vino nuevo en odres viejos; pues de otro modo, los odres revientan, el vino se derrama, y los odres se echan a perder; sino que el vino nuevo se echa en odres nuevos, y así ambos se conservan."


Estas palabras están sacadas de contexto. En su origen hablaban de la religiosidad institucionalizada y una nueva manera de vivir la fe. Pero yo quiero utilizarlas hoy porque el ejemplo se puede aplicar a muchas situaciones de la vida.

Hoy en día no queda casi ninguna zurcidora. Esas mujeres que sabían arreglar un roto, un desgarrón, en una pieza de ropa. También cogían los puntos de las medias, para evitar que se hiciese una carrera.Hoy las cosas son de usar y tirar. Sólo se arregla aquello que es muy costoso o tiene un valor sentimental muy alto.

Pero a veces, por más que se quiera, las cosas no tienen remedio. La pieza está muy raída. Remiendas y se hace un desgarrón justo al lado. Entonces hay que hacer de tripas corazón y reconocer que el momento pasó. La prenda ya cumplió su función un tiempo y hay que despedirse de ella. Mantenerla a toda costa no tiene sentido. Hay que hacer sitio en el armario, porque sólo así cabrán otras prendas con las que envolverse, abrigarse y adornarse.

Lo contrario es exponerse a quedar, un mal día, en plena calle con el culo al aire.

lunes, 27 de abril de 2009

Incerteza en el tiempo, esperanza en el fin


María Callas














UN BEL DI VEDREMO

Un hermoso día veremos alzarse
un hilo de humo en el horizonte.
Y entonces aparecerá la nave.
Luego, esa nave blanca entrará
en el puerto, atronando con su saludo.
¿Lo ves? ¡Ya ha llegado!
Yo no bajo a encontrarme con él.
Me pongo allí, en lo alto de la colina,
y espero, espero largo tiempo
y no me pesa la larga espera.
Y saliendo de entre la multitud
un hombre, un punto pequeño
se destaca por la colina.
¿Quién será? Y cuando llegue,
¿qué dirá? ¿qué dirá?
Llamará a Butterfly desde lejos.
Y yo, sin dar respuesta,
estaré allí escondida,
un poco para inquietarlo,
y un poco para no morir
al primer encuentro, y él,
con alguna inquietud, llamará, llamará:
"Pequeña mujercita, olor de verbena",
los nombres que me daba
cuando volvía a casa.
Todo esto ocurrirá, te lo aseguro.
Guárdate tu miedo,
yo con firmeza le espero.



miércoles, 22 de abril de 2009

Impaciencia


Baño Azul
Didier Lourenço




martes, 21 de abril de 2009

Confesión y propósito de enmienda



Desnudo
Edward Weston













DESAFINADO


Si tú me dices que yo desafino amor
Quiero que sepas que me provoca mucho dolor
Solamente privilegiados como tú tienen un oído como el tuyo
Y yo sólo tengo el que Dios me ha dado

Si tú insistes en clasificar
Mi comportamiento de anti-musical
Yo, aunque esté mintiendo debo argumentar
Que esto es “Bossa Nova” y es muy natural

Lo que tú no sabes ni tan siquiera puedes presentir
Es que los desafinados también tienen corazón
Te he fotografiado en mi “Roley Flex”
Se ha revelado tu enorme ingratitud

Solamente no podrás hablar así de mi amor
Él es el mas grande que tú puedes encontrar
Tú con tu música te has olvidado de lo principal

Que en el pecho de los desafinados
En el fondo del pecho late callado
En el pecho de los desafinados
También late un corazón.

Antonio Carlos Jobim



Desafinación: Desviación de la perfecta entonación de la voz o de un instrumento, que produce desagrado.


No soy católica, pero hoy vengo a confesarme y a entonar un mea culpa.
Mi pecado ha sido el del prejuicio, que me ha hecho pensar que “el otro”, cualquier otro que no encajase dentro de mis esquemas, estaba desafinado.
También he pecado de crítica, cuando no he sido capaz de ponerme en el lugar de ese otro y sin analizar todos los detalles y las razones no sólo he pensado mal, sino que lo he expresado en palabras. He hablado muchas veces creyendo estar “en lo correcto”, en posesión de la verdad.

Pero luego viene la vida y te abofetea, te encara con el espejo, te mira con cara burlona y te dice:
"Y tú ¿Tú no estás desafinada? ¿Encajas tú en los esquemas de los demás? ¿Dónde estaba tu humildad?
Ahora te tienes que comer tus palabras con patatas."

Aunque ¿Sabéis? Ahora me quedo en paz. No me autoflagelo ni alargo la penitencia de la autoconciencia. Sólo tomo nota y aprendo para la próxima. Espero que esto que cuento me haga un poquito mejor persona.

El que esté libre de pecado que tire la primera piedra.
Jesús de Nazaret

sábado, 18 de abril de 2009

Efecto mariposa, efecto dominó



















"el aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo".
Proverbio chino



Hay cosas que no tienen explicación, no sabe una como han podido ocurrir.
Todo empieza por un pequeño detalle, una pequeña casualidad, si las hubiese. Algo fortuito, al menos a primera vista.

Iba a intentar explicar lo que en matemáticas se denomina “el efecto mariposa”, pero me voy directa a Wikipedia y copio-pego, a favor de la ciencia, porque yo soy más bien de letras.

Dice así:

"El efecto mariposa" es un concepto que hace referencia a la noción de sensibilidad a las condiciones iniciales dentro del marco de la teoría del caos. La idea es que, dadas unas condiciones iniciales de un determinado sistema caótico, la más mínima variación en ellas puede provocar que el sistema evolucione en formas completamente diferentes. Sucediendo así que, una pequeña perturbación inicial, mediante un proceso de amplificación, podrá generar un efecto considerablemente grande.
Un ejemplo claro sobre el efecto mariposa es soltar una pelota justo sobre la arista del tejado de una casa varias veces; pequeñas desviaciones en la posición inicial pueden hacer que la pelota caiga por uno de los lados del tejado o por el otro, conduciendo a trayectorias de caída y posiciones de reposo final completamente diferentes. Cambios minúsculos que conducen a resultados totalmente divergentes.

En realidad esto estaría relacionado con la explicación de lo que se ha dado en llamar el "sistema caótico". Yo creo que al final todo tiene un orden, una causa, un por qué y un fín. Creo.
Pero el caso es que un pequeño cambio lleva a otro, y éste, por lógica, a otro, y éste a otro más, por lo que una consecuencia del efecto mariposa es que al final conduce al efecto dominó.

La vida es sorprendente, si mantienes los ojos bien abiertos cuando pasa el tranvía de la oportunidad. Va lo suficientemente despacio como para que puedas subirte en marcha, pero no para. Si titubeas pasa de largo.





Julien, gracias por regalarme esta canción. Hoy la estreno aquí, y me acuerdo de ti con cariño

sábado, 11 de abril de 2009

De todo, como en botica


Manceba en botica. Socarrat.















Las canciones son como los medicamentos.

Tienen indicaciones, contraindicaciones, efectos secundarios y hay que obedecer la posología.

Y, como pasa con los medicamentos, tendemos a automedicarnos y a recomendar a los amigos lo que nos fue bien a nosotros.


Lo que conviene en un momento no va bien en otro. La Aspirina, por ejemplo, se utiliza para calmar el dolor, como antiinflamatorio, antipirético y para evitar los trombos, creo, pero hay que tener cuidado si se tienen problemas de estómago, y puede desencadenar el síndrome de Reye.

En música, eso pasa con Sabina. Es un genio, pero en según qué momentos su tierno cinismo es contraproducente.

No sé si existe un medicamento que sirva para todo. Lo más probable es que, si el prospecto lo indica así, en el fondo no sirva para nada. Será un placebo.

Pero hay un poeta-cantante que sí es todoterreno. Que sabe ser tierno, irónico, reivindicativo, asertivo…

Ese es Serrat. Entre su obra hay de todo, como en botica. Sus canciones animan, calman, reconfortan, remueven tu conciencia y, sobre todo, no hay peligro de intoxicación ni sobredosificación.

Y sus efectos secundarios siempre son positivos.


miércoles, 8 de abril de 2009

Aceptar
















Para aceptar un regalo tienes que abrir las manos,
para aceptar un abrazo tienes que hacer sitio en tu pecho,
para aceptar un beso tienes que poner la mejilla,
para aceptar una carta tienes que abrir al cartero,
para aceptar la sabiduría tienes que escuchar la verdad,
para aceptar la salud tienes que despedirte del dolor,
para aceptar la alegría tienes que abandonar a la conocida tristeza,
para aceptar la amistad tienes que abandonar la coraza,
para aceptar el amor desecharás el rencor.

Da miedo, pero la aventura es maravillosa.


viernes, 3 de abril de 2009

Fernando Pessoa - Cartas de amor



















CARTAS DE AMOR

Todas las cartas de amor son
ridículas.
No serían cartas de amor si no fuesen
ridículas.

También escribí en mi tiempo cartas de amor,
como las demás,
ridículas.

Las cartas de amor, si hay amor,
tienen que ser
ridículas.

Pero, al fin y al cabo,
sólo las criaturas que nunca escribieron cartas de amor
sí que son
ridículas.

Quién me diera el tiempo en que escribía
sin darme cuenta
cartas de amor
ridículas.

La verdad es que hoy mis recuerdos
de esas cartas de amor
sí que son
ridículos.

(Todas las palabras esdrújulas,
como los sentimientos esdrújulos,
son naturalmente
ridículas).

Fernando Pessoa