domingo, 28 de octubre de 2012

Camina y no revientes.











Josechiyah



Aprender a decir adiós sintiéndolo como parte -y arte- de la vida.  No como un paso más hacia la muerte, sino como cambio tozudo,  invitación a ir hacia delante.

No importa si te gusta o no, si lo has elegido o te es impuesto.  La realidad es muy tozuda y es indiferente a lo que tú sientes.  No importa si es justo o injusto, porque la historia siempre la escriben los que se creen vencedores.  Así que no te emperres en luchar contra lo que no hay.  Hay lo que hay y ha dejado de haber lo que fue.  O lo que tú crees que fue.

Ya no reconoces a los que consideraste íntimos.  Tienes que admitir de una vez por todas que ellos ya hicieron borrón y cuenta nueva hace tiempo.  Por eso no funcionaban ya los intentos de comunicación y te encontrabas perplejo después de una conversación telefónica, por ejemplo.

No te asomes más a su mundo, no busques, que nada se te ha perdido allí.

También ellos se han perdido algo.  Si tú crees muchas veces que el victimismo -esa cosa de mal gusto, tan poco elegante- ha estado demasiado presente en tu vida, piensa que también ha podido hacer mella en ellos.

Esto es lo que hay.  Ahora, camina y no revientes.

3 comentarios:

  1. Camina, camina. Pero siempre mirando hacia delante y con la cabeza erguida, te lo digo como coja que va con bastón.
    El transcurso de una vida es como un paseo. Si miras todo el rato hacia atrás te puedes chocar con gente con señales e incluso con árboles (vamos, te comes una hostia seguro). Si miras hacia delante te puedes tropezar, claro, pero te levantas y sigues. Porque un tropiezo sólo es un tropiezo y si caes con elegancia tu autoestima se recupera mejor cuando vuelves a levantarte.

    ¡¡¡Llámame coja, pero es lo que pienso!!!

    Tu querida Corde.

    ResponderEliminar
  2. cojita, te quiero. Renqueando, pero p'alante.

    ResponderEliminar
  3. El mundo está en movimiento constanta, pero casí nada se mueve al unísono o en la misma dirección. Hay que aprender a vivir en la corriente, y disrutar de las cosas que nos trae al encuentro, que no se sabe cuanto estarán ahi...

    ResponderEliminar