Una puede callar con su boca. Sus actitudes hablarán por ella.
Puede posponer el momento de hablar. Después resultará que lo que dice ya no es noticia.
Puede intentar no herir con las palabras. Al final a los demás les duele la falta de confianza.
Y si todo esto ya lo sabía...¿Por qué esperé tanto? El miedo me pudo.
Infravaloré a las personitas que tenían que escuchar esa verdad. Eran inteligentes y ya lo sabían, realistas y lo aceptaron, generosas y, aunque aturdidas, me siguen queriendo.
Y me siento liberada.
Decir la verdad, lo que hay, me ha hecho libre.
Amo.
Lo muestro y lo demuestro.
Amo.
Y soy feliz.
Querida amiga:
ResponderEliminarA veces es casi tan difícil hablar como callar. Cuesta lo mismo y duele más. Pero sí... supongo que algo en nuestro fuero interno nos dice que el silencio es menos duro (porque nos evita las miradas y las respuestas).
En el fondo, es peor para uno. Porque los remordimientos hacen más daño que esas miradas y esas respuestas que queremos evitar.
Me alegro de que te hayas liberado, de que ames, de que lo muestres y lo demuestres... y sobre todo, me alegro inmensamente de que seas feliz.
Un besito de este capitán al borde de su jubilación naval.
¿Quién no ha tenido miedo alguna vez? O alguna otra también. Enfrentarnos a nuestros propios fantasmas desde una perspectiva sincera, que es lo mismo que decir a nosotros mismos, lo encuentro muy difícil y muy liberador.Pero la paz que trae consigo esa liberación bien merece el esfuerzo.
ResponderEliminarGracias por esa felicidad que compartes con nosotros, me alegro por ti.
Buen verano a todos!
Besets i abraçades
PD: Estic poc al pc, però et llegeix i t'enyore.
Se me olvidaba la banda sonora jeje.
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=i6N0sNMKFO4
Mari,guapísima:
ResponderEliminarTiempo al tiempo. Tienes razónen que te pudo el miedo y lo hemos hablado, pero esas personitas inteligentes te quieren y también necesitan su tiempo. Step by step que se dice por allá lejos.
Y estos días, has sido muy valiente y has llevado todo como había que llevarlo. Ahora toca descansar y seguir con la vida, que da muchas vueltas y, esperemos, es muy larga.
Un besazo y un abrazo terapéutico (te lo daré cuando te vea).
Corde.
Creo que a veces hay que callar hasta encontrar el momento adecuado… en que lo digo… o se vuelve contra mí.
ResponderEliminarTambién hay que pensar en el momento más apropiado para el receptor, aunque si las actitudes hablan…explicarse será más fácil.
Las noticias a bocajarro…nunca se sabe!
Pero según leo, Maritornes, esto es agua pasada.
Disfruta…un beso
.
Me alegra que seas feliz.
ResponderEliminarHe encontrado esta poesía que me gusta, es de Marcos Zapata:
!No desmayes jamás ante una guerra
de torpe envidia y miserables celos!
¿Qué le importa a la luna , allá en los cielos,
que le ladren los perros de la tierra?
Si alguien aspira a derribarte, yerra
y puede ahorrarse inútiles desvelos;
no tan pronto se abate por los suelos
el Escorial que tu talento encierra.
¿Que no cede el ataque ni un minuto?
¿que a todo trance buscan tu fracaso?
¿que te cansa el luchar...? No lo disputo!
Mas oye amigo, este refrán de paso:
!Se apedrean las plantas que dan fruto!
¿Quién del árbol estéril hace caso?
Espero que te guste. Besos.
Mañana os contesto. Hoy no podría.
ResponderEliminarUn beso a todos.